Abro este post para comentaros una pintura que captó mi atención desde el principio, y que consigue que cada vez que vuelvo a ella me transmita algo más. Es como si la imagen sufriera pequeños cambios que despiertan otra vez el interés en mi. Se trata de "La mesa roja" de Henri Matisse, o "Armonía en rojo" como él prefería llamarla. Mi intención con este post no es adentrarme en quién fué Matisse. Encontrareis infinidad de información sobre él. Simplemente me gustaría comentar con vosotros algunos aspectos técnicos de esta fascinante pintura: Las formas están modeladas sin luz ni sombra, por lo que no transmite sensación de solidez, sino de algo etéreo y espacial, y aunque sigue las reglas de la perspectiva consigue crear el efecto de que el mantel y el papel de la pared están en un mismo plano. Además, ofrece un aspecto espontáneo e infantil, tanto en las formas como en la selección del esquema cromático. Parece una pintura que se ha realizado rápidamente. Otro aspecto interesante, es la simplificación de las formas a su interés, modificando el contorno de los árboles y de la figura humana para armonizar con los dibujos del mantel y de la pared. También es destacable el esquema cromático. Es salvaje, típico de la estética fauve, con la utilización de colores primarios y simples. Si comparamos "La mesa roja" de 1908 con otra pintura suya de la misma temática pero realizada once años antes, "La mesa servida", de 1897 podreis observar la increible evolución de Matisse. De una influencia impresionista hacia una estética fauvista. Si no la conocéis, os invito a que hagáis la búsqueda. ¡Os sorprenderá!
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Marzo 2024
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